……….Ya estábamos de camino a Ponferrada. Cuando llegamos las pasamos putas para encontrar el hostal. Después de más de media hora lo conseguimos. Bego decía que era un hostal de putas y camioneros. La verdad es que estaba muy bien cuidado y muy limpio. En la cena nos sirvió una camarera con una mala ostia de cojones. Después se destapo. Me dijo que si estaba anchote. Todavía no logro comprender porque me lo dijo. Estos decían que me la iba a hacer. Todo mentira.
Subimos a la habitación para hacer el correspondiente botellón. Que putada que la gasolinera estuviese cerrada. Las copas sin hielo son lo peor. Salimos del hostal. En la zona donde estábamos ubicados estaban de fiesta. Ana decía que había bodegas y que estaban bien. Nada más lejos de la realidad. La “bodega” que conocimos era un solar limitado por una pared de bloques de cemento de los de las obras cubierta por un plástico de los que ponen en el campo para cubrir la paja. En la tapia habían hecho un agujero que era la entrada y la puerta era una valla de las de obra cerrada con un candado y una cadena.
Fuimos a tomar unos algos a una carpa. Fuera estaba toda la gente jugando con una pelota gigante. Uno iba a rematarla de cabeza y casi se queda sin ella de una patada. Con tan mala suerte (sobre todo para Ana) de que la pelota llego a nuestros dominios. Vila se dispuso a pegarla y le pego un ostiazo a la susodicha con el correspondiente pisotón posterior.
Llegaba el momento que todos estábamos esperando: el momento de ir a la OXI. Nada mas llegar lo primero que hicimos es mirar al escenario en busca del travelo. Ahí estaba el personaje. Además había unas go-gos de muy buen ver. Nos dirigimos a la barra para pedir. había una camarera con unas tetas impresionantes ( las chicas que leáis este comentario no os ruboricéis y sin tetas no hay paraíso). Pablin, que es un tío muy hábil, se coloco estrategicamente al lado del altavoz. Como la tía no entendía lo que le estaba pidiendo, Pablin se acercaba cada vez mas a ella (quería hablar a los micrófonos).
Todo hasta el momento estaba dentro de la normalidad y la tranquilidad. Hasta que a Hugo se le ocurrió la feliz idea de tomar unos tequilas. Nos tomamos dos del tirón. Entre tequila y tequila Pablin se marco un lírico con Bego……….
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